miércoles, 21 de octubre de 2009

Empiezo con Alberto

A ver si poco a poco voy añadiendo cosas, textos, reseñas de "Casi sin querer", algo tenía que hacer con el blog y así me vale para ordenar lo que he ido encontrando, como un escaparate de bombos y autos...
Y empiezo por Alberto García Teresa (coño, creía que se podían referenciar los textos directamente de sus fuentes pero, para no variar, no he sido capaz. Lo copio y lo pego)


Casi sin querer
Javier Vázquez Losada
Baile del Sol, 2009
ISBN: 978-84-92528-19-6

Alberto García-Teresa
Contradiciendo el título del poemario, Casi sin querer, el autor es consciente de la clara intención de los poemas del libro y nos ofrece una colección de diferentes piezas que transpiran una enfoque propio. Javier Vázquez Losada manifiesta una actitud honesta y sencilla, alejada de los grandes maximalismos, que permanece constantemente en búsqueda, asumiendo sus limitaciones: “más vale de que me entere / de que soy de mi propio / tamaño”; “y yo / siempre mirando / la luz desde la sombra”.
Los poemas están escrito en tono coloquial, mediante verso libre breve, en piezas pequeñas por lo general, bastante directas, que directamente nos llevan al foco poético.
Por otro lado, utiliza como referentes elementos cotidianos, por lo que busca una cercanía tanto de su espacio de creación como de comunicación con el lector. En ese sentido, suele introducir insertos y también aparecen interlocutores.
El autor empapa sus versos de cierta amargura, patente en la acidez de alguna de sus ironías. Sin embargo, precisamente esa también continua ironía nos coloca ante la duda de conocer a ciencia cierta qué enmascara qué. El sarcasmo tal vez sea una forma de apaciguar la angustia (“proclamándome ceniza / ceniza / tendida como la esperanza / ceniza”); una forma de mantener una posición lúcida frente al desasosiego. Su tratamiento de la muerte, de hecho, creo que es muy significativo a este respecto.
Así, podríamos decir que el tema central del libro es el ser, el tiempo. En ese terreno, se aprecia una melancolía asociada al descreimiento (“lo que fue / parecerá un será / y ya no es”). No en vano, es patente una posición firme del “yo poético”, el eje sobre el que gira toda la obra.
De este manera, Vázquez Losada aporta un poemario contenido, escéptico, que denota una postura activa (aunque pueda parecer velada) e igualmente disconforme ante la placidez de la vida.